Cuando la prensa promueve la corrupción

Wilfredo Santoro Cerda

En un sistema de libre mercado es fundamental que para cautelar ciertos valores, algunas premisas funcionen. Una de estas es la libertad de prensa. Para que un país en que impere un sistema económico de estas características no sea corrupto, necesariamente debe operar una prensa libre. Aquí en Chile, la prensa livianamente les endosa el problema de la corrupción a los políticos, no obstante oculta su propia responsabilidad, que es altísima. En otras palabras, Chile no podría ser tan corrupto si tuviese realmente una prensa libre.

Un hecho dramático se vive en la Segunda Región, donde la prensa escrita está dominada por dos diarios: El Mercurio de Antofagasta y La Estrella del Norte, ambos pertenecientes a la cadena El Mercurio. Allí es tan incontrarrestable la influencia de estos medios que no sólo mienten, sino que además promueven abiertamente las campañas políticas de personajes involucrados en la corrupción. Pero el pecado más grande estos medios no es incurrir en esas dos graves faltas. El problema más grave es denegar el derecho a la libertad de prensa, porque ellos no publican las “dos caras de la medalla”. Publican lo que ellos quieren, por muy mentira que sea, y censuran lo que no responda a lo que ellos proyectan, por muy verdadero que sea. Es decir, hay una ausencia total de ética periodística y como consecuencia, no hay libertad de prensa.

SIN LIBERTAD DE PRENSA, HAY CORRUPCIÓN

Esa falta de libertad de prensa es la que permite que este país sea cada vez más corrupto, porque en última instancia, los medios de comunicación se están financiando por la publicidad. Eso hace que el sector económico más poderoso del país maneje la prensa. La corrupción tiene un solo origen, se genera cuando el sector económico más poderoso comienza a comprar políticos... y periodistas.

Bien, ahora como un necesario ejercicio de ética periodística, me propongo a respaldar cada una de las afirmaciones que vertí al referirme a El Mercurio de Antofagasta.

“Estos medios mienten”: el 20 de febrero del 2004 El Mercurio de Antofagasta publicó la nota “Paso decisivo para parque industrial” mediante la cual afirmaba textualmente que “La cartera de Bienes Nacionales hizo la entrega oficial de un terreno de 5,8 hectáreas para el desarrollo de la primera etapa del parque industrial en Mejillones. Los empresarios reunidos en la Asociación Gremial de Pequeños Industriales de Mejillones (AGPIM) recibieron el sitio bajo el esquema de concesión onerosa por un lapso de 5 años...” Bien. Todo eso es mentira. El referido acto se trataba de la firma de un “Convenio de Interés Público” que ratificaba la decisión del Gobierno Regional de apoyar a los pequeños empresarios. Para constatar la falsedad de esa información me remito al mismo Mercurio de Antofagasta en su edición del domingo 10 de agosto del 2008 titulada Parque industrial en Mejillones es casi una realidad”, donde tras una bajada que señala “terrenos serían entregados bajo la modalidad de una concesión onerosa” asevera “...la autoridad regional está ultimando los detalles para la entrega oficial de los terrenos...”. En otras palabras, transcurridos 4 años El Mercurio de Antofagasta reconoce que mintió en su nota del 2004, pero esa mentira facilitó la toma ilegal de esos terrenos. Más aún, durante esos cuatro años El Mercurio se negó a publicar cualquiera información que diera claridad sobre este ilícito, actitud que aún mantiene. En otras palabras, basta revisar el mismo Mercurio de Antofagasta para descubrir sus mentiras.

UN EXTRAÑO APOYO POLÍTICO

“Promueven abiertamente las campañas políticas de personajes involucrados en la corrupción” Luis Le-Blanc es el presidente de Agpim, entidad que se tomó ilegalmente los terrenos en Mejillones. Este dirigente forma parte de una red de influencias dentro del Gobierno Regional que a través de Bienes Nacionales ha estado permitiendo las tomas irregulares de terrenos por parte de políticos de la Concertación, que después buscan ser regularizadas. Entre estos se puede mencionar al mismo Le-Blanc, presidente comunal de la Democracia Cristiana y candidato a concejal por ese partido, a Ricardo Molina, ex concejal PPD que hizo uso de su cargo para mantenerse en terrenos ajenos y también a uno de los actuales candidatos del partido radical. Esta situación ha sido planteada a diversos organismos, con las respuestas más disímiles. El Consejo de Defensa del Estado, mediante Ord 3954 del 5 de octubre del 2006, me manifestó que ante consulta realizada a Contraloría, ésta le había respondido que las 5,8 hectáreas pertenecían a dueños históricos y que yo ya había hecho la denuncia el año 2002, por lo cual el CDE no podía intervenir. Contraloría, a través del Dictamen 26260 del 5 de junio del 2006 me señaló que se abstenía de pronunciarse respecto a la toma ilegal, debido a que yo no era jefe jefe de servicio y como particular, no se me estaba denegando ningún derecho. Todo esto es terriblemente contradictorio, porque si es cierto lo que dice el Consejo de Defensa del Estado ¿por qué entonces Le-Blanc aparece diciendo en El Mercurio que los terrenos serán entregado por el Fisco mediante concesión onerosa? Otro detalle importante ¿cómo pude yo denunciar ante Contraloría el año 2002 una toma que se realizó el 2004? Bien. De esa índole son las acusaciones que pesan sobre Le-Blanc, pero El Mercurio de Antofagasta, además de impedir el libre desarrollo de la libertad de prensa ocultando cualquiera alusión a las tomas ilegales en que ha incurrido Agpim, aparece con una información de página completa (Parque industrial en Mejillones es casi una realidad), con una amplia foto que es la que utiliza Le-Blanc en su campaña política como aspirante a concejal por la DC en Mejillones. ¿El Mercurio de Antofagasta le solicitó una foto al Sr. Le-Blanc y este le pasó la que estaba usando en su campaña política?.... que falta de recursos y que ingenuidad de un diario que se tilda de serio. ¿cómo no va a tener un reportero gráfico? ¿o la foto es de El Mercurio de Antofagasta y fue su director quien autorizó que fuera facilitada al candidato DC para su campaña? Ambas opciones son malas. Más aún si ese mismo diario censura todas las informaciones que puedan afectar a Le-Blanc, referidas a sus acciones ilícitas.

UN DIARIO QUE ESCONDE LA CORRUPCIÓN

“Ausencia total de ética periodística y como consecuencia, no hay libertad de prensa” Durante varios años mantuve informado a El Mercurio de Antofagasta acerca de la situación de tomas ilegales de los terrenos de Agpim. Sin embargo, jamás salió una letra referida a esta denuncia. Todas las notas iban en el sentido de que se trataba de una entrega de terrenos o que se estaba regularizando. Cuando aparece la última información, en que se pontifica al autor del ilícito de las tomas y se le refuerza abiertamente su campaña política, envié la última carta al director. Se trataba de un profesional asumido hace poco tiempo, al que además conocía, lo que me hizo pensar que tendría un estilo más ético. No obstante, jamás publicó la carta ni tampoco me otorgó audiencia. Allí está la carta, allí están los documentos que avalan lo que señalo, allí están las evidentes contradicciones periodísticas de El Mercurio de Antofagasta como también su afán de otorgar apoyo político a un candidato de la DC vinculado directamente a un acto de corrupción, como asimismo la decisión irrevocable de los directivos de ese diario para ocultar la verdad, en el sentido que el parque Agpim de Mejillones es una toma ilegal.

NULA ACTITUD ANTICORRUPCIÓN

Bien. El sistema político en realidad está corrupto. Yo me di el trabajo de informar reiteradamente el problema de corrupción que ahora expongo, debidamente probado, a todos los parlamentarios (diputados y senadores) El 90 por ciento no contestó. Un 5 por ciento dio respuestas amables (como “ya se lo envíe al parlamentario en su jurisdicción”... parlamentarios que las habían recibido con anterioridad y jamás hicieron nada). Hubo un 4 por ciento de respuestas como “interesante, por favor insiste en marzo, porque ahora ya viene la navidad y entramos en receso para una merecidas vacaciones” Es decir, tres meses de vacaciones pagadas y ninguna preocupación por los temas nacionales, como lo es la corrupción. Ahora, siempre hay una excepción a la regla. Este fue el diputado Carlos Montes, quien tomó los antecedentes remitidos y solicitó la investigación a Contraloría. Contraloría le respondió cualquier cosa y con esto el citado parlamentario se dio por satisfecho. Cuando digo respondieron cualquier cosa me refiero a cosas como “fue siempre atendido” y “todas sus interrogantes respondidas”, en circunstancias que el Contralor jamás me recibió... su secretaria me manifestó que no pidiera audiencia porque no me la iba a dar y mis consultas escritas eran devueltas sin responder hasta con el sobre en que las enviaba.

Chile está afrontando el problema de la corrupción... y lo está afrontando mal. Y Chile seguirá siendo cada vez más corrupto mientras no tenga una prensa libre. Y el sistema neoliberal, en el cual la subsistencia de los medios está sujeta al rating, mata a los medios que dicen la verdad.